Powered By Blogger

viernes, 3 de octubre de 2025

LO QUE NUNCA QUISIMOS SER

I


Hay momentos que mis recuerdos

son clamores de pertenencia.

¡Que aún es mío un amor que se

eternizó con el discurrir del tiempo!


¡En mi tiempo!


II


En otros momentos,

de nostalgia y reproche,

mis recuerdos se hunden

en sentimientos de pérdida

y de ausencia aguda y vital.


¡De tu ausencia

que me abraza la vida!


III


Es nuestro tiempo otoñal

y no es suficiente el recordar.

Hoy - en ambos - viven juntas

la pertenencia y la pérdida.


¡Esa es nuestra condena

y nuestra hojarasca existencial!


IV


Ya no somos lo que fuimos

- es cierto -

y, en lo profundo, del alma:


¡Duele!


Pero... a pesar

de todas las tristezas

y silencios,

hoy debemos de aceptar

que somos...


¡Lo que nunca quisimos ser!










martes, 29 de julio de 2025

PER ARDUA AD ASTRA

I


Un cielo nocturno despejado,
sin luna y cuajado de estrellas,
siempre ha fascinado a la humanidad.

Ha habido quienes, en su contemplación
y desde tiempos inmemoriales,
se han preguntado qué serán todos
esos puntos brillantes que nos hipnotizan
y que embellecen el éter o la bóveda celeste.

Algunos pagaron en la hoguera
del fanatismo y la ignorancia
el afirmar que eran otros mundos y galaxias.
Otros fantasearon con viajes interestelares
o caminando sobre la superficie lunar.
Algunos con visitar "los canales de Marte"
o disfrutar las "selvas y playas tropicales" de Venus".

Los más recientes, con colonizar el sistema solar
y otros, los pocos, con enviar naves al espacio profundo
con mensajes a civilizaciones hipotéticas
grabados en discos de oro con direcciones astronómicas
y con saludos en nuestra multiplicidad lingüística y cultural.

Y en el largo peregrinaje de esas naves pioneras,
echarle una última mirada
- nostálgica y filosófica -
a esa minúscula mota azul que es nuestro hogar.

¡La imaginación y la ciencia como motores del conocimiento!


II

Ese anhelo expansivo,
enquistado en nuestra genética,
nos ha llevado
desde
nuestra cuna ancestral en África
hasta colonizar nuestro planeta;
y a llevar y fosilizar nuestras huellas
más allá de nuestros límites planetarios.

Y a entender que estamos llamados
a explorar nuestro universo
en busca de las respuestas a nuestras
preguntas existenciales más profundas.

Somos formas de vida bendecidas
con el don de la curiosidad, el asombro
y la dureza de la sobrevivencia.
Con el genio de la inteligencia,
la razón, la fe, la inventiva y la resiliencia;
y con poderosas virtudes
intelectuales, psicológicas y sociales.

¡Todas ellas en constante evolución tanto
las biológicas,
como las civilizatorias y cognoscitivas!

III

Pero… se nos hace imperativo,
ahora más que nunca,
el pensar y actuar como especie
y ya no solo como individuos;
porque nuestro planeta es nuestra cuna,
pero no hay razón alguna
para que también sea nuestra tumba.

¡Y nuestro olvido cósmico!

Nuestro futuro está en nuestras manos
porque, al final de cuentas, lo que hagamos
para superar - una vez más -
nuestros humanos límites y alcanzar las estrellas
le es absolutamente indiferente a nuestro universo...








viernes, 18 de abril de 2025

CULPABLE

 ¡Fui yo!

¡Yo fui el culpable...!


Idas y venidas.

Ausencias y reencuentros.

Nunca el compromiso,

nunca la entrega ni la confesión.


Reconozco mi soberbia

al no querer cambiar,

a pesar de tus ruegos

tu resiliencia y resignación. 


Hoy todo esto me abruma

con el peso del remordimiento.


Un calvario de melancolía,

culpa y soledad

que azotan una vida ya vivida

y que hoy añora 

aquel amor que no supo vivir.


¡Sí!

Fui yo...


El único culpable 

por este vacío angustioso

en el que ahogo 

un egoísmo sin redención...

¡Soy yo!






sábado, 22 de marzo de 2025

ODA AL PRIMER AMOR

I


Es noche.

Oscura y sin luna.

Y, absorto en ella, 

suspiro y medito. 


Me abandono

a lo profundo de mi memoria.

A mi eternidad...

 

¡A mis recuerdos!

 

Estoy callado

ante el imperio del olvido.


¡De tu olvido!


Y sin palabras reprocho

esta ausencia que,

con el paso de los años, 

se ha llenado de preguntas.  



Nuestra ausencia.

¡Nuestro silencio!


II

 

Y la vida, como el río,

siguió camino a las honduras.


¡Hacia nuestros destinos!


La luz de tu sonrisa virginal

se fue diluyendo lentamente 

en las difusas neblinas del tiempo.


Y los años inevitables se vistieron 

de anhelos, silencios y preguntas.

De brisas y vientos de ayer.


Y no supe más de ti... ¡Hasta hoy!


III


En esta noche oscura 

- profunda y fría - 

mi corazón viejo y cansado,

envuelto en sus nostalgias, 

ha vuelto a sonreir:



¡Vive el milagro del renacer

al misterio y frescura del primer amor!






jueves, 20 de marzo de 2025

EL ESPEJO DE LOS AÑOS

 

¡Abrumadora penitencia!


Una fuerza incontenible

que aprisiona... y quema.


Un vacío que se llena,

gota a gota,

con lágrimas y risas.

 

¡El recordar!


La melancolía y la euforia.

El fracaso y la victoria.

El amor y el olvido.


¡El mirar de frente

y desafiante la adversidad!


Las primaveras del renacimiento

y los veranos de excesos y pasión.  


Los otoños llenos de preguntas

y el invierno naciente que ya golpea 

- imperioso y húmedo -

en los cristales de mis ventanas...

 

Son las cenizas aún ardientes

en mi conciencia y memoria...


¡Reflejadas irremediablemente

en el espejo de mis años!




lunes, 8 de julio de 2024

MI PATRIA

Mi patria no es solo
el Reventazón o el Virilla,
el Tempisque o el Térraba,
o Chira, Cocos, Venado y Calero.
Mi patria no es solo
San José o Puriscal,
Puntarenas o Nicoya.

Mi patria no es solo el Zurquí,
ni las llanuras san carleñas,
ni los balcones bohemios y vetustos
del Barrio Amón o el Club Unión.

Mi patria no es solo Sixaola
ni San Vito de Java,
ni Quepos ni Golfito,
ni Paso Canoas
ni Peñas Blancas.

¡Mi patria es mucho más
que lugares y nombres!

Mi patria no es solo la tierra
donde lloré por primera vez,
donde amé por primera vez
y donde dormiré por última vez.

Mi patria no es solo
el lamento o la desconfianza
del bribrí, el cabecar,
el cholo o el guaymíe.
Ni el patuá del negro caribeño,
el "uyuyui bajura" del sabanero,
el silencio burlón del cartago
o la alegría contagiosa del costeño
puntarenense o guanacasteco.

No es solo la tristeza o el llanto
del indigente o el miserable,
ni la altanería o la prepotencia
del "conectado" y poderoso.
Ni el tugurio intimidante
y hoguera de conciencias,
o el barrio exclusivo
protegido por gendarmes,
por murallas y alambradas
de navajas o electrificadas.

No es solo
la opaca casa de cristal,
el laberíntico palacio azul,
la mole gris legislativa,
el fortín, el valle central
ni los “malls” y "out-lets"
que brotan como plagas.

Ni el Festival de la Luz
o la fresca brisa decembrina.
Ni las heridas que se arrugan
y enquistan en la indiferencia,
en la miseria y el hambre
o en los clichés y refugios
del “pura vida”
y la “Suiza centroamericana”.

Mi patria no es solo
el malecón que vigila
al mar infinito y misterioso,
o el volcán que imponente
se eleva hasta un cielo
azul y prístino;
o el río impetuoso
que moldea las montañas
y desafía la humana osadía.

Mi patria es mucho más
que tiempos y recuerdos,
pasados, presentes y futuros,
gentes y costumbres,
amores, envidias y odios.

Y mi patria no es solo
una democracia enferma,
ni una libertad confusa
y llena de remiendos.
Democracia y libertad
a las que hemos ultrajado
y abusado sin reparo ni castigo.

¡No… !

Mi patria es todo este compromiso
para con su gente, sus generaciones
y sus descendientes;
por su mar, su cielo, su luna,
sus ríos, sabanas y montañas.
Mi patria es el resplandor
y la intensidad de toda esta tierra.
Es la generosidad y la hospitalidad
que reclaman honestidad y trabajo.

Mi patria,
esta que llamo mi patria,
es todo esto y mucho más.

Es mucho más que suma
o resta que llena o vacía
un insano y falso nacionalismo.
Mi patria es un todo
vertido en indomable amor
que respeta y obliga,
que vive y se alimenta todos los días
de todas - y otras no dichas-
estas pinceladas.

Es la madre cobijada,
y que nos cobija,
con la sábana multicolor
del blanco, azul y rojo.

¡Mi patria
es una sola promesa,
un solo destino,
una sola responsabilidad,
una sola lucha,
un solo amor
y un solo nombre!


¡Mi patria, toda,
se llama Costa Rica…! 




domingo, 23 de junio de 2024

CONTRA MI EGO

I


Varias veces he detenido mi reloj vital

para alejarme de las calmas de la rutina.

Para sentarme a ver y oler las olas del hoy

en su rítmico ir y venir... libres e indomables.

Para dejar que el viento del atardecer

acaricie mi piel y se enrede en mi cabello.


Y para meditar en acogedor silencio:

¡No para descubrirme, sino para redefinirme!


II


En muchos recodos de mi vida dejé

-algunas veces por frívolo-

olvidadas mi conciencia y dignidad.


Pero, sin darme cuenta,

ambas no dejaban de llamarme

-a gritos-

en sueños o frente al espejo.


III


No soy de ocasionales periplos existenciales

con el fin de descubrir mi “yo”

-de ese ya tengo una buena idea de cómo es-

sino en una búsqueda profunda y vital

para redefinir raíces, orígenes y valores

de mi hoy, de mi presente y de sus ecos en el ayer.


¡Un peregrinaje hacia

la esencia misma de mi ser!


¡Hacia ese persistente ego que,

en no pocas ocaciones,

me ha definido... y derrotado!


IV


¡Esas han sido las grandes odiseas de mi vida:

las reiteradas batallas de enfrentar y derrotar

un enemigo tan incidioso como lo ha sido mi ego!


Muchas, lo confieso,

miserablemente las perdí.

Pero algunas las gané

tras amargas horas y días

de dolor y remordimiento.


V


Pero...con los años aprendí

que ese formidable guerrero es resistente

al encierro, al silencio y al anonimato.


Sigue alli agazapado,

en las trincheras de la soberbia,

a la espera de otra oportunidad.


Y a pesar de mi certeza de que la tendrá,

lentamente he ido construyendo murallas

que me ayuden a combatir sus erotismos.


VI


¡Y es así como he podido disfrutar

-al fin-

de una relativa paz que solo se conquista

en las inocentes miradas de mis amores

y en las llamas de la penitencia y el perdón...!