Aunque
llores
hasta que
ya
no puedas
llorar más.
Aunque creas
que tu vida
ya no es
más vida
y que no
habrá paz a tu sufrir.
O sientas
que no hay ventanas
en tus
cielos nublados,
y que tu
corazón sea preso
de penas, iras y tristezas.
Entonces... detente
y piensa en mi.
Solo piensa
en mi
y cúlpame de tu infortunio.
Piensa en
mi
hasta que
encuentres el recuerdo
que alivie el
dolor de tu soledad.
Solo piensa
en mi
para que vuelvas a sonreir
y para que me
puedas perdonar.
¡Solo piensa en mi
para que
me vuelvas amar...!